Consejos para conducir en invierno (con hielo, nieve, viento, lluvia..)

¿Vas a utilizar tu coche en invierno? En transdelachica.es, tu empresa de transporte de confianza, siempre nos preocupamos por tu seguridad. Por eso queremos darte alguna serie de consejos para conducir en invierno.

Consejos para conducir en invierno

No importa si hay lluvia, hielo, nieve o viento en la carretera, lo que importa es que sigas estas recomendaciones para que te sientas seguro. Porque lo más peligroso es realizar maniobras o controlar el vehículo en situaciones climatológicas delicadas, como por ejemplo una fuerte lluvia. Aunque el hielo en la carretera podría hacerte patinar. Pero estos problemas pueden evitarse.

Consejos para conducir con lluvia

Para conducir con lluvia y no tener problemas, es importante que los faros, espejos, parabrisas y limpiaparabrisas estén en buen estado. Podrás quitar el vaho de los cristales por medio del aire caliente o aire acondicionado. Lo que sí es importante, es aumentar la distancia de seguridad y llevar las luces encendidas.

Consejos para conducir con nieve

Lo mejor es utilizar marchas largas y usar el acelerador de forma gradual. Deben evitarse completamente los movimientos fuertes. En algunos casos podría ser necesario el uso de cadenas. También se recomiendan unos neumáticos de invierno, sobre todo en los casos más fuertes y/o peligrosos.

Consejos para conducir con niebla

Lo primero que hay que hacer si se va a conducir con niebla carretera, es activar el alumbrado antiniebla. Una vez llegados a este punto, lo siguiente ya será ir despacio y con calma, porque la falta de la visibilidad nos puede meter en un apuro. Ve despacio y controla bien las distancias.

Consejos para conducir con viento

En el caso de que haya más viento de lo normal, es importante sujetar el volante con fuerza y seguridad. También es necesario reducir la velocidad, para que tengamos más tiempo para reaccionar.

Lo que también es muy importante, a mayores de estas recomendaciones, es evitar perder los nervios o entrar en estado de pánico. Lo mejor es estar lo más tranquilo lo posible e ir despacio. Y si hay que parar, se para.

Pero ante condiciones climatológicas adversas, lo mejor es reducir la velocidad, ir muy pendiente de la carretera y esperar a que mitigue.